Debes haber notado lo difícil que es concentrarse en lo positivo, esto proviene de tu cerebro, que está programado para detectar amenazas, un mecanismo de supervivencia desde los días en que el hombre cazaba y vivía con el riesgo de ser asesinado.
Aquí tienes algunas pautas para lograr un estado mental positivo, mejorar tu salud física y mental, y tu rendimiento profesional.
Superar la tendencia del cerebro a enfocarse en las amenazas
Hoy en día, este proceso genera pesimismo y negatividad que hacen que tu mente divague hasta encontrar una amenaza. Cuando el riesgo es real, esta reacción es útil, pero si es imaginario, te invade una imagen de la realidad que causa estragos en tu vida.
Mantener una mentalidad positiva es un desafío diario que requiere atención cuidadosa para superar esta tendencia del cerebro a enfocarse en las amenazas. La positividad es la habilidad esencial para el éxito.
Promueve la positividad y tu salud física y mental
El pesimismo es malo para tu salud. Numerosos estudios demuestran que el optimista está en mejor forma física y psicológica que el pesimista. Tu nivel de pesimismo u optimismo influye en tu salud general, y según los investigadores, la salud del pesimista se deteriora mucho más rápido con el envejecimiento.
De la misma manera, se ha encontrado que el optimista tiene menos probabilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares y vive más tiempo. Según investigadores de Yale y la Universidad de Colorado, existe una correlación entre el pesimismo y un sistema inmunológico debilitado.
Tu positividad influye en tu rendimiento profesional
Mantener una actitud positiva no solo es bueno para tu salud. En particular en las profesiones de ventas (todos somos vendedores, ya que no pasa un día sin que tengamos que convencer, transmitir una idea o cambiar algo...), se ha observado que el vendedor optimista es significativamente más exitoso que el pesimista, como el ejecutivo recién contratado que es optimista y tiene la mitad del riesgo de perder su trabajo en el primer año. La verdadera positividad consiste en convertir un pensamiento alarmista en uno optimista.
Separar los hechos de la ficción
Enfocarse en lo positivo primero requiere dejar de repasar ideas negativas que se alimentan de la negatividad. Cuanto más rumias pensamientos estériles, más poder les otorgas, cuando la mayoría de estas obsesiones son ficciones y no hechos.
Para medir correctamente su realidad, puedes, por ejemplo, anotarlos en una hoja de papel, lo que ralentiza su flujo y te permite evaluar su veracidad. Al releer tus notas fuera del momento en que las escribiste, te darás cuenta de que no siempre son fácticas. Y para las que aún parecen hechos, pregúntale a un amigo o colega de confianza si está de acuerdo contigo. Y la verdad debería salir a la luz.
Cuando sientas que un evento o amenaza se repite, recuerda que tu cerebro tiende a inflar su frecuencia o gravedad. Identificarlas y etiquetarlas, separándolas de los hechos, te ayudará a escapar del ciclo vicioso de la negatividad.
Reenfócate en una referencia positiva
Una vez que te deshaces de los pensamientos negativos, debes entrenar a tu cerebro para que se enfoque en lo positivo. El pensamiento realista reorienta fácilmente la atención de tu mente cuando los eventos van bien y tu estado de ánimo es bueno. Pero cuando las cosas van mal y tu mente está plagada de pensamientos pesimistas, se convierte en un verdadero desafío. Una solución puede ser buscar en tu día o en los días anteriores algo positivo, sin importar su importancia.
Lo principal es tener esta referencia a la que puedas dirigir tu atención cuando un pensamiento negativo te invada. Primero elimina su poder separando los hechos de la ficción, luego reemplázalo por algo positivo. Y una vez que hayas identificado este pensamiento constructivo, dirige tu mente hacia él cada vez que tu mente tienda a lo "negativo". Si esto resulta difícil, vuelve a escribir este pensamiento para desacreditar su veracidad, y rápidamente acompáñalo del pensamiento positivo para aprovecharlo.
Cultiva una actitud de gratitud
También se ha observado que aquellos que se toman el tiempo para ser agradecidos obtienen un beneficio personal y reducen en gran medida su nivel de estrés. Las investigaciones realizadas en la Universidad de California han revelado que quienes cultivan una actitud de gratitud todos los días disfrutan de una mejora en su estado de ánimo y energía. Mantener esta disposición te enfoca en lo positivo.
Siempre que sientas la amenaza de la desgracia, usa la gratitud para dar una señal fuerte a tu espíritu, y con el tiempo, el comportamiento positivo se convierte más a menudo en un estilo de vida y una estrategia para alejar la neurastenia.